Ayer se nos fue José Carlos Fernández. Se fue en silencio, sin hacer ruido. Discreto como el era. Solo podemos decir buenas cosas de José Carlos. En nuestro trato profesional siempre fue respetuoso, comprensivo y nada altivo. Imaginamos que en lo personal seria lo mismo. Ayer el hipódromo estaba muy triste. De esos días en los que vas a trabajar o a disfrutar de tu afición sin muchas ganas pero sabiendo que tienes que estar a la altura porque esto se lo merece. Seguro que José Carlos sonreiría, o se ruborizaría, al ver tantas muestras de afecto y tantos profesionales afectados y seguro que hasta el propio Winkl Side sabia lo que tenia que hacer en un dia tan triste.
Nuestra infancia esta llena de recuerdos de caballos como Bariloche, Habit…… y de su jockey. Hoy nos acordamos de Celtic Rock, de Hispánico, de Mickey……. y de su preparador. Descanse en paz José Carlos Fernández.